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JAB

De Ortigueira vengo

Pues así es. Ayer de magrugada llegué de pasar cuatro días en el Festival Internacional de música Folk que se celebra todos los años, desde 1987, en Ortigueira. Como ya comenté en otro artículo, que éste era mi primer año. Así que ahora podré dar mis impresiones: es una pasada :P Bien, pero ahora por partes:

- La gente: hay de todo. Se juntan grupos de lo más variopinto: pijos, alternativos, heavies, malotes, hippies... Es curiosa esa mezcla que se produce, pero hay muy buen rollo. Nadie se mete con nadie y todos allí van a pasárselo bien. Sólo un consejo para los pijos: es mejor ir cómodos. Nadie os va a criticar porque no vayáis estupend@s :P

- El camping: muchísimo espacio para acampar. Si vas antes del Jueves, no tienes problema para encontrar un buen sitio. El Viernes o Sábado se hace más complicado y te quedan las zonas donde no hay iluminación o metidas en las pistas, donde cualquiera puede caerse encima de tu tienda. Hay que darse cuenta de que este festival atrae a miles y miles de personas. La limpieza del camping es otro punto a favor. A todas horas había personal que se encargaba de recorrerlo recogiendo la basura que había por el suelo y cambiando las bolsas de las papeleras. Los baños también eran limpiados cada poco tiempo y se agradece. Las colas para los baños eran siempre kilométricas. Me pregunto yo: con tanto monte que hay alrededor y no se utiliza para otros menesteres? :P Para las duchas también había colas, pero no tanta como en los baños, supongo que, además de que la gente se lavaba lo mínimo -o nada-, el hecho de que el agua saliera fría, influía. Esto es el porqué de esa mezcla extraña de olores de todo el camping. No había problema para tomarse algo o comer algún bocadillo. Había puestos cada dos por tres y los hippies tenían los suyos propios, te preparaban desde paella hasta kebab's. Si es que estos hippies son gente de mundo :) Ah, además podías hacerte trenzas de cuero, rastas, comprar colgantes o pulseras... vamos, que se lo tienen bien montado. Si te descuidas, tienes todo lo necesario en el camping para no tener que irte fuera a hacer o buscar nada. Hasta ponen música a todas horas (sí, al parecer este año también había una especie de carpa dance...)

- El pueblo: cobra mucha vida estos días para alegría de los hosteleros. La gente es muy amable -como todos los gallegos ;)- y el pueblo está muy limpio. No lo recorrimos todo porque estábamos entre los escenarios y unos bares que ya se convirtieron en míticos, donde desayunábamos, comíamos y cenábamos :D Según se acercaba la noche, las calles se llenaban e incluso se formaban atascos de gente. Por las calles del pueblo también había artistas callejeros que animaban aun más el pueblo.

- El tiempo: lo peor. No llovió, pero es que es un tiempo tan cambiante que desespera. Sale el sol y hace un calor insoportable y, de repente, se nubla todo y comienza a pegar un viento frío que obliga a ponerte algo más que la camiseta de manga corta. Menos mal que el último día hizo un día propio de estas fechas para poder disfrutar de la playa de Morouzos. La gente de Ortigueira cuenta con los dedos los días al año que vienen de Verano. Esto es Galicia, señoras y señores, ya se sabe qué pasa con el tiempo :)

- Los conciertos: qué se puede decir de un festival internacional? Muy buenos. Mucha gente y las actuaciones en directo de estos grupos siempre son buenas. No hace falta ser un entusiasta del folk para disfrutar de esta música, sobre todo en directo. Para mí, lo mejor fue la actuación del grupo esloveno Terrafolk, grandes animadores y excelentes músicos.

- Otras cosas: Justo delante de nuestra tienda, se tiró un tipo desde un árbol, a una altura de unos 6 metros. El hombre intentaba hacer el pájaro, pero no aleteó lo suficiente. Creo que no había tomado suficientes medicamentos... Afortunadamente, no le pasó mucho. Eso debía de saberlo el camillero porque iba partiéndose de risa mientras se acercaba al 'suicida' y tuvo que darle la camilla a otro compañero porque no podía más... Y es que la atención sanitaria estaba presente siempre. Luces y sirenas de ambulancia se acercaban y alejaban del campamento varias veces al día. Un centenar de emergencias se atendían al día. Que nadie se alarme, tampoco es para tanto :P

En fin, no quiero extenderme mucho más. Tan sólo decir que repetiré el año que viene. Conoces a mucha gente, disfrutas de música en directo, no gastas tantas pelas -el camping es lo que tiene- y pasas unos días geniales.

Cartel [ Ortigueira 2005 ]


PD Iré poniendo fotos en breve. También espero algunas de unos amigos madrileños -que espero que hayan podido regresar a su casa :P- Aprovecho para mandarles un saludo y también a las futuras biólogas, Cristina y Tatiana :)

:: Actualización: en mi espacio en flickr, por el tag Ortigueira, podéis ver algunas fotos

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